“No debemos valorar tanto lo que damos, sino el amor que ponemos en lo que damos. Educar es tarea del corazón” - Madre Carmen Sallés
En la etapa de Educación Infantil se produce un gran desarrollo a nivel cognitivo, motor y socio-emocional en las mentes de nuestros alumnos más pequeños. Acompañados de sus profesores y familias, dan sus primeros pasos hacia una mayor autonomía en sus tareas y se produce un crecimiento exponencial de sus vivencias a nivel social con su grupo de iguales.
El centro tiene el firme compromiso de educar a su alumnado de forma integral, constituyendo así la base de todo el aprendizaje y los cimientos del éxito académico futuro.
Para implementar todo ello, el centro cuenta con un programa propio de aprendizaje a través de metodologías activas, sensoriales y afectivas, que ponen al alumno como protagonista y eje vertebrador de su propio aprendizaje. Potenciando así la adquisición de competencias básicas que les ayudan a incrementar su capacidad atencional, memoria, habilidades lingüísticas, su motivación, creatividad, entusiasmo e ilusión para afrontar todos los nuevos aprendizajes y retos que esta etapa les propone.
Su sonrisa es nuestra mayor satisfacción.
“Hagamos extraordinariamente bien lo ordinario” - Madre Carmen Sallés
En la etapa de Educación Primaria nuestros alumnos se enfrentan a cambios madurativos provocados por el paso de la niñez a la preadolescencia. Continúan buscando su espacio en la clase, en la familia, en su grupo social de amigos… Para ello desde el colegio les ofrecemos un entorno seguro y de confianza desde dónde poder crecer, madurar y seguir dando pasos en su camino.
El alumnado de 6 a 12 años, que abarca la etapa de primaria, tiene por delante la adquisición de las competencias y objetivos marcados por la actual ley educativa. Para llevarlo a cabo cuentan con la colaboración y el apoyo del profesorado que, adaptándose a sus ritmos de aprendizaje, crean y diseñan actividades adecuadas a sus necesidades.
Nuestro objetivo es transmitir un continuo afán por descubrir nuevos conocimientos, fomentando la cultura del esfuerzo e integrándoles en la realidad de su contexto. Con la intención de crear hábitos útiles para su vida cotidiana, respetando la singularidad de cada uno y conduciéndoles a ser la mejor versión de sí mismos.
Contamos con ustedes, las familias, como comunidad educativa, para seguir llevando adelante, de forma conjunta, nuestro proyecto educativo.
“Los ejemplos de vida hablan con más claridad que las palabras” - Madre Carmen Sallés
El alumnado de la ESO está inmerso en la etapa evolutiva de la adolescencia. Etapa marcada por cambios y transformaciones.
Gracias al modelo educativo de centro se pretende guiar al alumnado a salir de sí mismo y desarrollar una conciencia social y grupal en la que poder tomar decisiones acertadas basadas en la reflexión y el pensamiento crítico. Se continúa educando a la persona de forma integral, acompañándola en su propio proceso madurativo y de crecimiento dentro de las competencias y objetivos marcados por la actual ley educativa.
A su vez, se propone que cada alumno sea capaz de elaborar un proyecto de vida en el que realizar sus potencialidades con el fin de obtener una satisfacción personal y colaborar en el desarrollo del bienestar social.
“Las palabras se pierden y el ejemplo arrastra” - Madre Carmen Sallés
El alumnado de bachillerato ha adquirido cierta madurez a nivel personal y hábitos de trabajo y estudio más definidos, que les ayudarán a tomar las mejores decisiones pensando en sus planes de futuro.
Para el centro es de gran importancia seguir potenciando en nuestros alumnos el sentido de la justicia y los derechos y obligaciones que tienen ahora como ciudadanos activos de nuestra sociedad. Ahora son ellos el motor del cambio. Creemos que la educación recibida les permitirá adaptarse personal y profesionalmente a la sociedad que les toque vivir.
Confiamos en vosotros como hijos que habéis sido educados en una casa de María Inmaculada. ¡Suerte y aquí tenéis vuestra casa!
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